Es una alteración de la voz que perturba la comunicación. Manifestándose como un esfuerzo al emitir un sonido; dificultades para mantener la voz, cansancio al hablar; variaciones de la frecuencia, carraspeo o falta de volumen. En general, hace referencia a los trastornos que afectan a la laringe o cuerdas vocales.
Los factores de riesgo a tener en cuenta en los profesionales que utilizan la voz son: ruido de fondo, mala acústica del ambiente, distancia amplia al hablar, sequedad, polvillo, malos hábitos posturales en el trabajo y carga vocal (tiempo e intensidad) por hablar y cantar.

Mas información
aquí y
aquí.
No hay comentarios:
Publicar un comentario